A Galeano, como a la mayoría de los escritores que me gustan leer, “lo descubrí” por accidente.
Hurgando en una biblioteca un día me encontré una de sus obras…elegí el libro por el título porque, como dije, entonces no sabía nada del autor: El fútbol a sol y sombra. Pero bastó que leyera algunas páginas para darme cuenta que esos pequeños escritos, que lo mismo describen al gol, al jugador, al árbitro, que a ídolos, goles famosos o copas del mundo…pero con un lenguaje maravilloso, analítico e incluso un poco filosófico, debían pertenecer a alguien que seguramente tenía muchas cosas más de las cuales escribir que solamente fútbol.
«El barrio lo envidia: el jugador profesional se ha salvado de la fábrica o de la oficina, le pagan por divertirse, se sacó la lotería. Y aunque tenga que sudar como una regadera, sin derecho a cansarse o equivocarse, él sale en los diarios y en la tele, las radios dicen su nombre (…).
El gol es el orgasmo del fútbol. Como el orgasmo, el gol es cada vez menos frecuente en la vida moderna (…).
¿Ha entrado usted, alguna vez, a un estadio vacío? Haga la prueba. Párese en medio de la cancha y escuche. No hay nada menos vacío que un estadio vacío. No hay nada menos mudo que las gradas sin nadie (…).
Corría el año 1992, Yogoslavia había estallado en pedazos, la guerra enseñaba a los hermanos a odiarse (…) Dos periodistas mexicanos, Epi Ibarra y Hernán Vera, querían llegar a Sarajevo y a más de un periodista le había costado la vida (…) Los soldados los arrojaron al suelo de un empujón y les apuntaron al pecho (…) Entonces a los condenados se les ocurrió mostrar sus pasaportes. Y el rostro del oficial se iluminó: —¡México! — gritó —. ¡Hugo Sánchez! Y dejó caer el arma y los abrazó«.
El jugador, El gol, El estadio, Hugo Sánchez, fragmentos. En El fútbol a sol y sombra. Eduardo Galeano, Uruguay 1995.
En efecto, después me di cuenta que Galeano tenía obras célebres como Las venas abiertas de América latina, libro que explica el saqueo del que han sido objeto los países latinos a manos de las potencias europeas y que le significó, junto a otras obras, recibir Doctorados Honoris Causa por diferentes Universidades de Argentina, México, Cuba, el Salvador…así como premios literarios de gran renombre como el Stig Dagerman, el American Book Award o el Premio Casa de la Américas.
El caso es que, se coincida o no con sus ideas, me parece que hoy es un buen día para conocer la obra de quien dejara este mundo un día como hoy, pero del 2015.
Y para hacerlo de un modo directo, a su “modo y manera”, como decía él mismo, aquí les dejo una serie de videos llamados La vida según Galeano donde muestra su particular visión de los temas que llamaron su atención a lo largo de su existencia: mujeres, miedos, amares, “los nadies” y futbol, entre otros: